Manco Cápac y Mama Ocllo

Enunciado

Manco Cápac y Mama Ocllo

Leyenda inca

Cerca del lago Titicaca vivían los hombres como animales en cuevas. Se alimentaban de la caza y de frutos que recogían de los árboles.

Inti, el dios del sol, estaba preocupado por esta situación y les dijo a sus hijos Mama Ocllo y Manco Cápac que deberían bajar a ayudarlos para que aprendieran los cultivos, vivieran de las cosechas, se respetaran mutuamente, y rindieran culto al dios creador Inti.

Les entregó un bastón de oro y les pidió que cuando llegaran al lago Titicaca, apoyaran el bastón en la tierra en cada ocasión en que se detuvieran. Cuando el bastón entrara en la tierra con facilidad, sería la señal de que era el sitio elegido para fundar la capital: se llamaría Cuzco y desde allí gobernarían todo el imperio.

Al día siguiente, los hermanos se vistieron con sus mejores ropajes y bajaron al lago. Todas las personas quedaron impresionadas porque pensaron que eran dioses y decidieron seguirlos.

Mama Ocllo y Manco Cápac iniciaron la caminata sin olvidar apoyar el bastón en tierra cada vez que se detenían. Así caminaron durante muchos días hasta que una mañana llegaron a un valle y se detuvieron. Cuando apoyaron el bastón, se hundió en la tierra sin dificultad: era el lugar elegido para fundar el Cuzco, que quiere decir "ombligo del mundo".

Manco Cápac enseñó a los hombres el arte del cultivo y la cosecha; también a construir sus casas para que no vivieran en cuevas, y a cazar animales.

Mama Ocllo les enseñó a las mujeres a hilar y tejer con la lana de las llamas. También a cocinar los vegetales y los animales que cazaban los hombres.

Tiempo después, Manco Cápac y su hermana Mama Ocllo gobernaron el nuevo imperio del dios Inti que se extendió por el sur hasta el río Maule, en Chile.

Manco Cápac y Mama Ocllo, en Cuenta conmigo

¿Por qué las personas decidieron seguir a Manco Cápac y Mama Ocllo?

Alternativas

A) Porque querían aprender a cazar.

B) Porque creyeron que eran dioses.

C) Porque los vieron con un bastón mágico.

D) Porque los vieron vestir hermosos ropajes.